No existe el adiós para quien se ha querido, no existen distancias ni olvidos, para quien el corazón guarda
No existe el temor cuando hay esperanza, no existen dudas frente a la confianza
No existe el olvido donde habitan recuerdos. No existen barreras para un sentimiento.
Y como no existe razón cuando el corazón manda, aquí continúo sin querer dejarte ir, te llevo y te guardo en mi mirada, en las yemas de mis dedos, en mí latir.
Como mi terquedad es más fuerte que este tedio, me aferro a mi sueño y no lo dejo partir. Me agarro con uñas y dientes a lo que siento, aunque todo diga que es inútil seguir.
No existe el cansancio si llevo tu aliento que me llena de fuerza, si lleva un nombre mi meta
No existe tristeza si guardo la risa y la alegría de tu alma en mi alma
No existen finales donde aun hay caminos, cuando aun mis pasos buscan su destino
Por eso hoy respiro y en cada aliento te llevo conmigo, vivo con tu latir en mi corazón, sueño con tu mirada en mi sueño, mientras viva esa es mi esperanza, llevarte presente en cada recuerdo, pues en mi amor no existe olvido, porque no existe el adiós cuando se ha querido, se que en otro camino, estarás conmigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario